El Rol Estratégico de las Finanzas Sostenibles en el desarrollo de nuevos negocios

Las finanzas sostenibles han dejado de ser una tendencia para convertirse en un factor determinante en el desarrollo empresarial contemporáneo. Para los emprendedores, inversores y actores del ecosistema de venture capital en Latinoamérica, comprender este cambio de paradigma no es solo una cuestión de responsabilidad corporativa, sino una decisión estratégica que impacta directamente en la valoración, acceso al capital y viabilidad a largo plazo de los nuevos negocios.

¿Qué Son las Finanzas Sostenibles?

Las finanzas sostenibles se refieren a la integración de factores ambientales, sociales y de gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés) en las decisiones de inversión y financiamiento. Este enfoque busca promover prácticas sostenibles tanto públicas como privadas, a través de acciones concretas e incentivos que permitan un desarrollo económico que no comprometa la salud del planeta ni el bienestar social.

El Cambio de Paradigma en el Ecosistema de Inversión

El mercado de capital de riesgo está experimentando una transformación profunda. Los inversores ya no se conforman con promesas vagas de impacto positivo, sino que solicitan evidencia concreta, métricas y mejoras iterativas. Esta exigencia ha llevado a que fondos de venture capital líderes, como 500 Startups, implementen procesos de inversión ESG en sus fondos globales.

Beneficios Tangibles para Startups y Nuevos Negocios

Integrar criterios ESG desde las etapas iniciales del proyecto no solo mejora la sostenibilidad de la propuesta de valor, sino que representa un diferencial estratégico en mercados altamente competitivos. Los beneficios incluyen:​

Acceso a Capital en Mejores Condiciones: Los mercados financieros valoran a quienes aplican criterios ESG, facilitando mejores condiciones de financiación. La concesión de préstamos mayoristas sostenibles alcanzó cifras récord, duplicando la financiación verde tradicional. Las empresas sostenibles atraen inversiones, fondos verdes e incentivos, recibiendo dinero en condiciones más favorables debido a su perfil de riesgo más bajo.​

Aumento en la Valoración: Estudios de Deloitte revelan que un aumento de 10 puntos en el "ESG score" conlleva un incremento de entre 0,4 y 0,7 puntos en el múltiplo EV/EBITDA, lo que aplicado a empresas comparables supone un aumento medio de la valoración de entre un 2,7% y un 4,7%. Este impacto es aún más acusado en el sector servicios, con incrementos de hasta 6,6%.​

Reducción de Costes Operativos: Implementar medidas de eficiencia energética y optimizar recursos puede disminuir gastos de manera significativa. El menor consumo de energía y recursos naturales, junto con la mejora de la eficiencia operativa, elimina desperdicios y disminuye el consumo de materias primas e insumos.​

Atracción de Talento: Los empleados, especialmente las nuevas generaciones, prefieren trabajar en empresas que compartan sus valores y demuestren compromiso con la sostenibilidad. Las empresas con fuerte cultura de sostenibilidad atraen empleados comprometidos y motivados, promoviendo mayor rendimiento y competitividad.​

Mitigación de Riesgos: Las empresas con buenos resultados ESG pueden atraer inversores responsables, lo que mejora el acceso al capital y reduce el costo del financiamiento. Considerar factores ESG ayuda a identificar y mitigar riesgos relacionados con el cambio climático, conflictos laborales y problemas de gobernanza.​

El Caso de Chile: Liderando la Sostenibilidad en la Región

Chile se ha posicionado como líder regional en la integración de criterios ESG en su mercado financiero. El país lanzó recientemente la Taxonomía de Actividades Económicas Medioambientalmente Sostenibles (T-MAS), un sistema de clasificación basado en evidencia científica que define qué actividades económicas pueden considerarse sostenibles desde el punto de vista ambiental.​

La T-MAS proporciona certidumbre, transparencia y comparabilidad a los mercados, facilitando la transición hacia una economía más sostenible. Este marco permite determinar de manera objetiva, creíble y basada en la ciencia qué actividades, proyectos e inversiones se consideran medioambientalmente sostenibles. Un aspecto innovador es que incluye al sector minero como elegible, reflejando la importancia de esta industria en la economía nacional y el compromiso por hacerla más sostenible.​

Para las startups chilenas, la T-MAS representa una oportunidad de oro: proporciona un lenguaje común con inversores, facilita el acceso a financiamiento verde y permite diferenciarse en mercados competitivos.​

Implementación Práctica para Startups en Etapa Temprana

A diferencia de las grandes corporaciones que pueden permitirse departamentos dedicados a sostenibilidad, las startups deben adoptar un enfoque pragmático, integrando el ESG en el diseño mismo del modelo de negocio y en la cultura fundacional del equipo. No se trata de añadir capas burocráticas, sino de incorporar lentes de impacto a cada decisión estratégica desde el día uno.​

En materia ambiental, esto implica evaluar y mitigar la huella ecológica del producto o servicio, incluso si aún no se ha llegado a la fase de escalabilidad. Una startup de e-commerce puede comenzar seleccionando proveedores con prácticas sostenibles u optimizando embalajes reciclables. Las startups tecnológicas deben atender el consumo energético de sus servidores, la gestión del ciclo de vida del hardware o el diseño de código eficiente.​

En el eje social, la mirada se amplía más allá del impacto externo para incluir las condiciones internas de trabajo, la diversidad del equipo, la inclusión de género y la relación con las comunidades afectadas. El diseño centrado en el usuario debe incorporar variables sociales como accesibilidad, privacidad o impacto en poblaciones vulnerables.​

La gobernanza es quizás el criterio ESG menos comprendido por las startups en fase semilla, pero su importancia ha crecido exponencialmente. Incluir buenas prácticas de gobernanza no solo previene riesgos futuros, sino que genera confianza entre inversores, socios estratégicos y empleados clave. Esto abarca la transparencia financiera, la claridad en la toma de decisiones, la existencia de mecanismos internos para resolver conflictos y la protección de datos.​

Herramientas y Métricas para Startups

Existen metodologías simplificadas y adaptadas al contexto startup para medir el desempeño ESG. El ESG Due Diligence Toolkit del Global Impact Investing Network (GIIN), los marcos B Impact Assessment para empresas B Corp, o las directrices de la Task Force on Climate-Related Financial Disclosures (TCFD) pueden utilizarse de forma modular.​

Algunas aceleradoras y fondos han desarrollado sus propias plantillas de evaluación ESG para startups early-stage, enfocadas en procesos más que en resultados, reconociendo la naturaleza dinámica de estos emprendimientos. La aparición de software de gestión ESG enfocado en startups permite recopilar, analizar y reportar datos de forma ágil, reduciendo la fricción operativa.​

El Futuro de las Finanzas Sostenibles en Latinoamérica

La convergencia de regulaciones progresistas, creciente demanda de inversiones con impacto y liderazgo de empresas y bancos está cimentando un futuro más sostenible para Chile y América Latina. La región está preparada para captar una mayor cuota de la inversión global ESG, aprovechando su vasta riqueza natural y creciente capacidad para innovar en soluciones verdes.​

BCI, reconocido como el banco más sostenible de Chile, se ha comprometido con la iniciativa Net-Zero Banking Alliance y ha ampliado su oferta de productos financieros verdes. Scotiabank ha sido distinguido como el "Mejor Banco en Finanzas Sostenibles en Chile" por segundo año consecutivo. Estos actores están demostrando que la inversión en sostenibilidad no es un costo, sino una inversión en el futuro.​

Para los emprendedores del ecosistema de VC Group, el mensaje es claro: integrar criterios ESG desde el día uno no es solo éticamente correcto, sino estratégicamente inteligente. Las startups que abracen estos principios tendrán mejor acceso a financiamiento, alianzas estratégicas y un consumidor cada vez más consciente. En un mundo donde los criterios ESG ganan terreno en la toma de decisiones, la sostenibilidad se ha convertido en una licencia para operar y crecer.​

La pregunta ya no es si adoptar finanzas sostenibles, sino cuándo y cómo hacerlo de manera efectiva. El futuro del emprendimiento latinoamericano

será sostenible, o no será sostenible, o no será.

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Finanzas Sostenible en Chile